El mercadillo del coche antiguo de Villaviciosa de Odón es para mí, y para muchos de los que allí nos encontramos, un mercadillo de sensaciones, de recuerdos. Recuerdos de aquellos tiempos que a algunos ya nos corren parejos a esos coches, de sensaciones al ver los coches que nos evocan nuestros héroes de la niñez. Junto a los SEAT 600, Supermiorafiori 2000, Fu, etc. posan coches que en nuestro recuerdo los veíamos en nuestros sueños: el de James Bond, el de Roger Moore, el de Elvis Presley, etc. Todos esos coches, y aún otros a los que ni siquiera sabríamos relacionarlos con un personaje, tienen cabida en el Vaillo de Villaviciosa de Odón.
El domingo pasado, la gigantesca pradera del Vaillo estaba repleta. Repleta de coches, repleta de recuerdos y de sensaciones. El mercadillo atrae a tal cantidad de coches, clubes automovilísticos y curiosos, que se le debe dar la importancia que se merece y los parabienes de autoridades públicas y sectoriales que todo gran evento necesita. Reconocer la labor de aquellos que idearon, buscaron las autorizaciones, consiguieron poco a poco atraer a los aficionados a Villaviciosa de Odón, ya no es suficiente; ahora hay que alentarlos para que se sigan esforzando, aún más, y lo que hasta ahora fue una actividad de aficionados al automovilísmo, pase a convertirse definitivamente en un evento automovilístico que busca su merecido espacio entre todos aquellos que son primer orden. Para ellos nuestro aliento y, si es necesario, nuestro apoyo.
Cilindrada: 1.998 cc
Relación de Compresión: 9,5:1
Válvulas: 2 por cilindro, accionadas por empujadores.
Potencia: 118 hp @5800 rpm
Transmisión: Manual de 4 velocidades sincronizadas y overdrive.
Frenos: Girling de disco/tambor
Carburadores: Zenith Stromberg 175 CD2 (2)
Aceleración 0 a 100 km/h: 12 s
Distancia entre ejes: 2.450 mm